¿Todavía no conoces la Isla Blanca? Ibiza se nos descubre encantadora y la mejor manera de conocerla es en primavera. Una época de más facilidades y menos preocupaciones. Hoy hablamos de los todo incluido en un paraíso costero.
Ibiza es un paraíso del que podemos gozar en España. Una de las Islas más atractivas que conforman el archipiélago de las Islas Baleares. Un lugar al que acceder en avión desde cualquier destino o ir en ferry partiendo desde Valencia o Barcelona.
Una isla llena de posibilidades para pasar ratos que recordar con alguien especial o simplemente con amigos. Su costa recorre cerca de 210 km repletos de calas, extensas playas, peñascos e islotes de aguas marinas y arena fina de la que te acaricia los pies, pero que también posee monumentos históricos que marcan un antes y un después en su historia.
Conocida como Ibiza la que muchos llaman con cariño la Isla Blanca, declarada Patrimonio de la Humanidad y que se nos descubre gracias a municipios con encanto, empezando por Santa Eulalia del Río donde debéis ir a conocer la iglesia del mismo nombre, subiendo un monte que corona en un precioso mirador con casas encaladas, así como pasear y perderos por las calles del casco histórico conocido como Dalt Vila «la ciudad alta».
Si queréis coger perspectiva de la isla, sí o sí debéis hacer una pequeña ruta hasta el Faro de Moscarter donde veréis romper las olas, y la visita de relax a la Cala Benirrás puede ser una muy buena opción para aquellos que quieran disfrutar de un ritual hippie al atardecer algunos domingos, y Cala Xarraca para los que se animen a probar a hacer snorkel o escalar algunos islotes. Por último, es de visita obligada pasar por el Parque Natural Ses Salines, un lugar con rincones solitarios a orillas del Mediterráneo. ¡Todo un espectáculo!
Lo cierto es que para visitar y disfrutar de Ibiza como uno más, lo mejor es la visita de una semanita. Os aseguramos que una vez que ves mar se te pasa todo lo malo y sólo aparece lo que te hace bien: el relax. Yendo más allá, si queréis vacaciones con más facilidades y menos preocupaciones, Invisa Hoteles es un ejemplo excelente de hoteles en Ibiza todo incluido para estar como reyes en la isla.
Los hoteles cuentan con todo lo necesario para haceros sentir como en casa, pero con esa sensación de novedad. Habitaciones de colores cálidos con preciosas vistas desde el balcón, pistas deportivas y gimnasio para aquellos que quieran seguir en forma, un bar abierto para preparar esos cócteles que apetecen de vez en cuando y zonas chill-out para tostarse al sol en la piscina. ¡Un todo en armonía!
¡Eso sí! Después de un chapuzón en una de esas playas ibicencas o de conocer sus recovecos, os recomendamos entrar en uno de los restaurantes que encontréis para probar alguna especialidad con productos de la tierra. Un entrante para empezar sería la sobrasada tostada o untada, seguido del conocido Sofrit Pagés preparado con carnes de cordero, pollo payés, patatas, legumbres y como no el butifarró, y para los amantes del pescado, la Borrida de Ratjada, un guiso caliente con raya, y la guinda llega con el flaó, un postre de queso de cabra y oveja con toques de hierbabuena.
Aquí podéis vivir noches interminables gracias a lo animada que es la vida nocturna, que ofrece discotecas y pubs de todo tipo para experiencias distintas, porque una cosa está clara, y es que te puedes sentir de Ibiza por un ratito.
¡Ibiza te da lo que tú quieres, sin que se lo pidas!
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