Si quieres comer parecido a los dioses griegos en la capital madrileña, estás de suerte. Moussaka, pasticho, souvlaki, salsa tzataki son algunas de las especialidades que Grecia tiene en su día a día. ¿Preparado para chuparte los dedos?
Grecia es un paraíso empezando por su capital, Atenas, un espectáculo que posee el Acrópolis y nos deja maravillarnos con el Partenón, seguido de un recorrido sin fin por todas las islas que lo completan como Santorini, Ítaca, que es mencionada en ocasiones en alguna tragedia griega o Mykonos. De hecho, Sócrates, Aristóteles y Platón dejaron un legado filosófico con ideas que hoy rondan por nuestras mentes.
Pero lo cierto es que se puede viajar sin moverse del sitio, desde el paladar, que es otra manera de conocer un país, y la comida griega aunque no lo creáis es una variación de la comida mediterránea, pero con influencias de oriente y occidente que al final le hacen tener una personalidad única.
Los ingredientes más utilizados son el queso, como es el feta, que a las ensaladas les termina dando un toque algo dulce, el pepino para algunas salsas como es la tzatziki que es un escándalo, las verduras como son la berenjena muy presente en la famosa moussaka que les gusta hacer, y el tomate que suelen rellenar de verduras con arroz. También destaca la carne de vacuno, cordero o cerdo en brochetas llamados souvlakis y algún pescado como el salmón.
Las curiosidades siempre vienen bien, asique os contaremos que los griegos tienen esa costumbre de echarle limón a casi toda la carne, como esa salsa que acompaña a las comidas, unido a un arroz blanco con queso fundido por encima o un puré de patata bien suave con sabor a nuez moscada, como guarnición de cualquier plato principal. Sus postres destacan por esos yogures cremosos, pero es que hay un bollo que hacen mojado en almíbar de naranja con canela, que te puedes caer del sitio.
Hoy os traemos un artículo de los que nos hacen morir de hambre, los mejores restaurantes griegos que se esconden en los barrios de Madrid. ¿Preparados?
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Restaurante Egeo
Este restaurante está situado en nuestra querida Malasaña, lugar de ambiente en sus noches y de tapeo en sus mañanas. Su nombre, Egeo, «en honor al noveno rey griego de la Antigua Atenas, que se suicidó tirándose al mar que hoy lleva su nombre, al pensar que su hijo Teseo había muerto en batalla».
Un bonito interior decorado al estilo griego, basado en azules y blancos que recuerdan a las islas y a días de sol. Entre su carta destaca ese trío de salsas típicas tzatziki, melintzanosalata y fava con pan de pita o sanos crudités, su plato rico de la verdadera moussaka junto a algún famoso souvlaki de carne en bocadillo.
Destacan gratamente por su atención y siempre disposición para recomendar lo mejorcito.
Dirección: Calle Barco, 41 (Metro Callao o Tribunal) y Calle San Carlos, 17 (Metro Lavapiés).
Restaurante Kritikos
Kritikos está situado en el famoso barrio de Chueca, un lugar muy céntrico donde disfrutar del ambiente después de una buena cena. Un restaurante pequeño y con una decoración sencilla, acompañada de luces cálidas con mesas de madera y sillas de mimbre.
Su carta presenta de todo, pero brillan por las empanadas griegas de espinacas, quesos griegos o kalamata y tomate con salsa de yogur. Además de un surtido de tapas de griegas para quedarse con ganas de más y un bacalao salónica con puré de patatas y ajo, sin olvidarnos de algún postre como el yiaurtopita o ravani.
Ya sabes adonde tienes que ir si os gusta la comida casera a precios muy asequibles.
Dirección: Calle San Gregorio, 11 (Metro Chueca)
Restaurante Mandrake
Este restaurante ubicado entre las zonas de La Latina y Puerta de Toledo, nos adentra en la Grecia más austera pero más rica. Lugar pequeño pero acogedor, que cuida los detalles en sus platos y con una atención espectacular.
Debéis saber que es popular probar sus croquetas rellenas de calabaza y unas patatas con queso feta para empezar a disfrutar, siguiendo de un gyro de pollo o cerdo con salsa de yogur y rematar con el gran postre baklava.
¡Eso sí! No olvidemos que la bebida también es un punto importante. En este caso, la cerveza Mhytos viene perfecta para terminar con un buen sabor de boca.
Dirección: Calle del Almendro, 21(Metro La Latina)
Restaurante Dionisos
Dionisos posee varios restaurantes en nuestra querida capital, son lugares íntimos con presencia de la madera y una música ambiente que os sumerge en esa Grecia que quizá todavía no conozcáis.
Las especialidades de la casa son muchas, pero se puede empezar por pedir un exquisito vino blanco de la casa junto unos dolmades como entrantes, seguido de una rica ensalada para compartir como es la Mykonos típica de la Isla que lleva gambas y aguacate, y si os gusta la pasta, el pasticho o los hilopites a la griega están de vicio como plato principal y único. Karidopita y halvás son dos postres buenísimos para acabar una buena comida por todo lo alto.
Además, cuentan con menús griegos preparados y personalizados para grupos grandes. ¡Eso sí! La mejor opción es reservar mesa siempre.
Dirección: C. de Augusto Figueroa, 8 (Metro Chueca o Tribunal) y Calle del León 17 (Metro Antón Martín).
Restaurante Zorba
Este restaurante desde el primer momento nos traslada a las playas de alguna isla griega… podría ser Mykonos, Creta o Zante, se puede elegir. De esta manera, se nos descubre un interior no muy grande dispuesto con mesas altas y taburetes al estilo taberna de tapeo griego, acompañada de una música muy agradable.
Algunos de sus platos más sabrosos son las albóndigas con salsa de tomate y un toque de menta, el saganaki, que es un queso frito que es muy típico, los bifteki de ternera y queso feta, la degustación de diferentes hummus y la dolmadakia que es de lo mejor que se prueba aquí junto al buen vino de Retsina. El postre que nunca defrauda es un yogur griego casero con un chorro de miel para deshacerse de placer.
Sin duda un rincón griego en el mercado de Ibiza en Madrid lleno de sabor y especias. ¿A qué esperáis?
Dirección: Calle de Ibiza, 8 (Metro Ibiza)
Todos estos restaurantes nos dejan un pedacito de Grecia en nosotros y lo mejor es que gracias a su cultura gastronómica siempre encontraréis opciones vegetarianas, veganas y sin gluten que os dejarán con ganas de volver.
¡Grecia, los griegos y el queso, sobre todo el queso están de vicio!